La “Suiza Andaluza”, como llamaban a la Alpujarra en el siglo XIX, siempre nos recibe con los brazos abiertos, aguardándonos con entornos preciosos, paisajes impresionantes, pasos imposibles y rincones dignos de privilegiados y es que, hasta uno de los fines de semana con la mayor tormenta de viento que yo recuerde en mucho tiempo, con su microclima, nos permitió disfrutar de una gran jornada de bicicleta…
La ruta: | |
---|---|
|
|
Desde la coqueta plaza del pueblo, partimos el grupo de amigos que participamos en esta ruta organizada por el Ayuntamiento de Pórtugos con motivo de sus fiestas, el mal tiempo en la capital, eso si, hace que muchos compañeros no decidan acompañarnos.
{loadposition anuncio1izq}
No tardaremos mucho en entrar en calor y poco a poco estabilizar nuestra altura y comenzar casi de forma imperceptible a avanzar sobre la ladera dejando atrás la zona de Pórtugos y dando vista a Trevelez, pueblo más alto de la Península Ibérica, al que accedemos tras el primer gran descenso del día.
La cosa empieza a ponerse dura.
En la plaza del pueblo nos espera un pequeño refrigerio que nos dará energías para afrontar el siguiente tramo que por asfalto, en ascenso nos llevará a las minas del Conjuro para descender por el Portichuelo de Cástaras hasta el Cortijo Panjulia, donde abandonamos el asfalto para tomar la pista que rodeando la montaña nos da vistas al impresionante barranco del río Trevélez.
s el momento de parar y disfrutar del paisaje, ya que divisamos perfectamente Pórtugos, Pitres, Mecina, Busquistar, Trevélez y así una infinidad de pueblos clavados en la montaña. La inmensidad del barranco que se abre a nuestros pies y que nos separa del otro lado es indiscutible y saber que ese será nuestro próximo paso nos hace una idea de lo que nos espera.
Cuando la palabra imposible se desvanece en relación a un sendero, podemos visualizar perfectamente la Cariguela de Fondales, antiguas vías de comunicación de la Alpujarra que hombres y bestias han transitado desde siglos inmemoriales convertidas en un auténtico reto para el biker más intrépido, aguerrido y que son la delicia de todos, ya sea montados en nuestras máquinas o simplemente andando mientras vemos como otros son capaces de realizar amplios tramos sino completo el descenso sobre sus monturas. Y es que el sendero, desciende de forma vertiginosa sobre si mismo enroscándose en la montaña y perdiendo una gran altura de forma inmediata para besar el lecho del río Trevélez que se salva pasando sobre un milenario puente romano, toda una delicia.
Con la sensación de haber vivido uno de los momentos mágicos del día, volvemos a emprender una nueva subida que nos acercará a Mecinilla, donde un buen avituallamiento nos repondrá antes de proseguir nuestra ascensión por la ladera.
Novecientos metros de desnivel positivo nos esperan hasta que por la sucesión de pistas sobrepasamos el propio Pórtugos hasta ganar la altura del Área Recreativa del Barranco Bermejo, para afrontar por un técnico y precioso sendero el descenso final que nos conducirá a nuestra meta, Pórtugos, donde nos esperan nuestros familiares y una gran paella perfecta para comentar los grandes momentos del día.
{loadposition anuncio2}
Perfil 1 de la ruta |
---|
Datos de la ruta |
---|
{loadposition anuncio3}
Ortofoto interactiva de la ruta |
---|
Para descubrir algunas de las posibilidades de este sistema pasar el cursor por el perfil. La tecla TERRAIN ofrece combinar distintos modos de visualización que adicionalmente con el zoom (+-) aportará máximo detalle del terreno. Además la tecla MORE ofrece opciones adicionales de interés general. |
{loadposition anuncio4}