Carrea competicion mtb 101 Km Ronda 2008

Otra nueva edición de los 101 km de Ronda, prueba ya mítica en el calendario nacional y que cada año reúne a miles de deportistas en la ciudad del Tajo para disfrutar de su deporte favorito, ya sea la bicicleta, la marcha o ambos, aunando un entorno natural rico paisajísticamente y exigente físicamente, así como un gran ambiente por todas aquellas poblaciones que jalonan el recorrido de la prueba.

Otra nueva edición de los 101 km de Ronda, prueba ya mítica en el calendario nacional y que cada año reúne a miles de deportistas en la ciudad del Tajo para disfrutar de su deporte favorito, ya sea la bicicleta, la marcha o ambos, aunando un entorno natural rico paisajísticamente y exigente físicamente, así como un gran ambiente por todas aquellas poblaciones que jalonan el recorrido de la prueba.

{loadposition anuncio1izq}

La recogida de dorsales fue bastante rápida, a pesar de ser casi 20 los que tuvimos que retirar, a excepción de alguno, que por haber incidencia tuvo que ser resuelta por parte de la organización.

Si la edición del año pasado estuvo marcada por el calor y el sol de justicia que nos acompañó durante toda la prueba, la de este año ha sido la lluvia, el frío y las nubes las que han reinado durante el fin de semana, haciendo acto de presencia también el viernes y desluciendo la Fiesta de la Pasta, cena de todos los deportistas en la Alameda del Tajo, donde se sitúa la línea de meta.

Mal tiempo

Tras la cena, era el momento de poner rumbo a Arriate y de preparar nuestras monturas para el día siguiente, fijar los dorsales, engrasarlas, realizar las últimas comprobaciones y ajustes para que nada falle. Con el nervio recorriendo la barriga nos vamos a la cama, dispuestos a madrugar, mientras en el exterior, la lluvia azota el campo que al día siguiente tenemos que recorrer.

El día de la prueba amanece muy nublado, amenaza lluvia y el problema de qué ropa elegir se hace evidente, dependiendo del plan de carrera de cada uno, entre culotes largos, piratas, cortos, windtex, etc,.. nos tomamos el desayuno, sabiendo que algo grande va a pasar y que nosotros somos protagonistas, en parte, junto a más de 5000 deportistas de una carrera quizá única.

Desde Arriate, tan sólo 10 minutos nos separan de Ronda, justo a la entrada, estacionamos los vehículos, sacamos las monturas, realizamos los últimos ajustes, nos ponemos el casco y entramos al Campo de Futbol, lugar de la salida de la prueba. Nos reciben nuestros anfitriones, los Caballeros Legionarios, a agolpe de sello, revisando uno a uno los pasaportes que harán de tarjeta de control a lo largo de toda la prueba. En la entrada al anillo olímpico y en nuestra condición de federados, pasamos por el principio, situándonos en las primeras líneas de salida, lo que nos permitirá evitar embotellamientos al principio y tomar un lugar privilegiado para el desarrollo de la carrera.

Mientras que se da la salida, no perdemos el buen humor, haciéndonos fotos, gritando, animando al público e incluso a los participantes, juntos a los amigos de Motril, del UCA y otras muchas peñas que nos rodean con las que nos tomamos fotos.

A las diez y media, es el momento del Viva a la Legión, Viva a España y del chupinazo que da paso a la lenta salida de los ciclistas hasta llegar a la calle principal realizando el tramo neutralizado que nos llevará a recorrer las céntricas calles de Ronda, hasta las afueras de la población, donde nos detenemos unos minutos hasta las once en punto, hora en la que salimos desde este punto, ya lanzados en carrera y desde el campo de fútbol salen nuestros compañeros marchadores que son los auténticos ironman de la prueba.

Se inicia aquí el recorrido de verdad, a lo lejos, la cabeza del grupo comienza a tirar buscando su fuerte media, permitiendo que el pelotón se estire en una larga serpiente multicolor, cuyas escamas son nuestros cascos, iniciamos las primeras rampas, que nos llevarán a internarnos en un paisaje de dehesa, que nos aleja de Ronda, quedando a nuestras espaldas sus blancas casas, sus monumentos y su imponente tajo al que regresaremos dentro de unas pocas horas. Es el momento de internarse en el polígono de tiro de las Navetas, su delicado entorno está prácticamente intacto gracias a la protección que le ofrece el ser un área restringida, pienso que en pocas ocasiones pasarán civiles por la zona, entre lomas y cerros con continuos sube y baja, poco a poco nos acercamos a las proximidades del circuito Ascari, los motores de algún coche rugen aunque no los veamos, casi sin darnos cuenta, rodeamos las Navetas y salimos por la zona de entrada, cruzándonos con la cola de los ciclistas y con los primeros corredores.

El siguiente tramo, por pista, tras superar un arroyo, nos llevará junto a la vía del tren, llaneando, hasta iniciar el descenso de Arriate y tras atravesar el pueblo y pasar por el río, encarar la primera subida seria de la ruta que nos llevará al Vértice de Salinas. Esta rampa inicial, aunque comienza con pendiente media y con pista ancha, en algunos puntos se pone bastante dura con la combinación de un piso pedregoso, de unas cerradas curvas y de una pendiente más dura, con el añadido de que vamos siempre rodeados de compañeros de la prueba que cada uno lleva su ritmo de rodada.

En la parte superior nos espera el correspondiente avituallamiento y un interesante tramo para recuperarnos, entre verdes campos de cereal llaneando empezamos a rodear Stenil, que será nuestro próximo punto de paso, al que llegamos tras una rápida sucesión de bajadas y siendo un nuevo punto de inflexión, ya que tras pasar por él, iniciamos un nuevo ascenso, bastante prolongado y dividido en dos secciones, separadas por una zona de llaneo muy frondosa. En esta zona, cuando encaramos la última subida, nos sorprende una fuerte llovizna que nos empapa hasta los huesos, pero que no nos impide seguir avanzando hasta ganar el collado que nos permitirá divisar de nuevo Ronda, aunque aun nos queda por llegar a ella, ya que desde aquí, descendemos hasta la base del pueblo y el Cuartel del Tercio, al que accedemos tras atravesar una divertida zona entre pinos y con arcilla roja que siempre me recuerda a nuestro Llano de la Perdiz.

No podemos pasar de largo el cuartel para parar y reponer fuerzas antes de enfrentarnos al último tramo de carrera, a pesar de faltarnos 20 kilómetros, se hacen los más duros del recorrido, ya que en ellos se concentran dos de las subidas más fuertes de la prueba.

Salimos desde el cuartel en un tramo de doble dirección, de frente ya vienen los que han recorrido la Ermita, ahora nos toca a nosotros encarar las fuertes pendientes que no dejan de sorprendernos año tras años. El carril escala por la ladera en varios tramos con fuerte inclinación, enlazados por algún tramo más suave y que nos hace dar toda la energía que nos queda para mantenernos sobre nuestras monturas, ganado altura rápidamente y dominando el paisaje de una de las partes más espectaculares del recorrido.

Tras superar las fuertes pendientes, ganamos la Ermita situado en un llano sobre los riscos y que en un paso natural, da acceso a la bajada por una pista empedrada con forma de tirabuzón y curvas cerradas que nos lleva hasta Montejaque, será el último punto de control, antes de enlazar la carretera, pasar por Benaoján y desviarnos hasta la base del río y la zona del molino, que nos permite tomar un precioso y frondoso sendero que pasa junto a la Cueva del Gato, tomando de nuevo un tramo de asfalto, para tras pasar el río, realizar un tramo de pista junto a la vía del tren y volver al punto de circulación en doble sentido, hemos superado el tramo de la Ermita, eso si, los compañeros con los que nos cruzamos aun tienen que afrontarlo.

Proseguimos nuestro recorrido, ascendiendo por asfalto hasta desviarnos a la derecha por tierra y ganar la loma que da acceso a lo hondo del Tajo de Ronda, una inmensa pared domina el paisaje y el susurro del río se hace presente en todos los rincones, en la parte más alta, la megafonía y los aplausos en meta nos dan idea de lo que nos espera a nuestra llegada. Poco tardamos en descender para de nuevo subir piñones y encarar la subida definitiva, en la que ya podemos gastar las pocas energías que nos queden, curva tras curva, rampa tras rampa, por el pedregoso camino, dejando atrás el río y ganando altura al tajo hasta igualarnos con él, para abandonar el campo e integrarnos en el casco urbano, junto a la muralla de la antigua alcazaba, parece que los pies se nos van solos cuando encaramos la última recta, con el bello de punta y embargados por la emoción, los aplausos y gritos de nuestros familiares, amigos y compañeros, pedalean por nosotros hasta la Alameda Principal, donde se sitúa la meta y nuestra satisfacción de haber superado una gran prueba.

No podemos dejar de esperar junto a la valla a cada uno de los compañeros que va llegando, para recibirlos como ellos se merecen y felicitarlos, orgullosos del trabajo realizado y satisfechos por haber dado lo mejor de cada uno.

Para mi es un placer haber compartido este fin de semana con familiares, amigos y compañeros y que muchos de vosotros halláis descubierto el espíritu de esta prueba.

Nos vemos en Ronda 2009

{loadposition anuncio2}

Perfil 1 de la ruta

Perfil 2 de la ruta

{loadposition anuncio3}

{loadposition anuncio4}

Mapa de la ruta
Con este mapa podrás visualizar esta ruta con más detalle e imprimirlo. Para descargarlo haz click sobre el mapa para abrirlo a mayor resolución después en el nuevo pulsa el botón derecho y selecciona «Guardar como» de las opciones disponibles.