31/03/12 Trek 12 Wild Wolf – Puerto Lumbreras

Es la 3ª prueba de cinco que forma parte del “1er. Open de Resistencia en BTT 2012” denominada “Trek 12 Wild Wolf series”, junto con una final de 24 horas que se celebrará en el 24Doce de Moralzarzal Madrid entre el 30 de junio y el 1 de julio. Siguiendo el ejemplo de otros Granabikes que decidieron buscar su límite en ediciones pasadas de la 24Doce, participando individualmente, por parejas o en equipos de cuatro; viajamos a Puerto Lumbreras, dos equipos de parejas, femenino y masculino, respectivamente para disfrutar de la BTT en compañía de buenos amigos.

Desde hacía tiempo me rondaba por la cabeza la idea de participar en la modalidad equipo 2 féminas. Así que animé a Ana a que intentáramos probarnos este año en la 24Doce.

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A las papas asadas le siguieron deliciosos postres: el pastel de nueces de Fede, las natillas de Ana y Jose y mis chirimoyas. Todo exquisito, tanto como la compañía.

Después de la cena llegó el momento de las inscripciones. Decidimos que disputaríamos la carrera abanderando el nombre de “Las Granabikes.com”. Ya no había marcha atrás; allá vamos… que tiemblen las murcianas, jejeje.

Jose y Fede se animaron también a acompañarnos formando otro equipo de dos, “Los Granabikes.com”.

A las 6.45 del sábado partíamos hacia Puerto Lumbreras, Murcia. Amanecía con nubes negras que cubrían todo el horizonte. Cruzábamos los dedos por que el día se presentara sin lluvia y nos respetara durante las 12 horas que duraba la prueba.

El Club la Pinilla C.C., organizadores de este evento deportivo, había habilitado una amplia zona para las carpas y caravanas. Allí se concentraban todos los equipos. Mientras Ana y yo íbamos a por los dorsales, chips y pulseras identificativas a las instalaciones del polideportivo, Jose y Fede fueron montando las carpas. Nos encontramos con los compañeros de Dr. Bike que iban en equipos de 4 y de 2 masculino.

Previamente a la carrera nuestro “centro de operaciones” ya estaba preparado: carpa montada, bicicletas a punto y un avituallamiento donde no faltaba de nada (fruta, pan, arroz con leche, pollo empanado, leche, café con una pizca de ron, barritas GUTs, miel, bizcocho, empanada Popeye-Power, chocolate, etc.)

Decidimos que la primera vuelta la daríamos Fede y yo. A las 11 de la mañana se dio el pistoletazo de salida. Teníamos por delante 12 horas para dar el mayor número de vueltas a un circuito de unos 12 km. (aunque en mi cuentakilómetros marcó 15.5Km).

Gran parte del circuito discurría por la rambla de Vilerda, lo que endurecía el circuito al rodar por arenas. La primera mitad iba en ligero ascenso por la rambla y pasando por varios cortijos hasta llegar a una fuerte repecho en el kilómetro 5.50 de unos 800 metros interminables. La “cuesta del cachondeo” estimo que podría ser fácilmente de un 30%. Tras este rampón se alcanzaba la mayor altura del circuito y comenzaba la bajada por una pista seguida de una estrecha vereda técnica que desembocaba en la rambla. La última parte del circuito continuaba por un llano hasta la meta con bastante arena en algunos tramos, donde había que extremar las precauciones para no derrapar.

La táctica de carrera que habíamos pensado era hacer primero una vuelta de reconocimiento cada una y después continuar con dos seguidas, hasta aumentar en tres, según como nos encontrásemos. Así, Ana tomó mi relevo para hacer la 2ª vuelta mientras yo la esperaba en nuestros boxes. Nuestra vuelta más rápida vino en la 3ª, 0:45:41. Continuamos haciendo dos vueltas cada una y así conseguimos ponernos a empate con el primer equipo, Bicicletas Gonzalo, liderado por dos chicas de un equipo de competición de Murcia. Ya teníamos el aliciente necesario para disfrutar aún más si cabe, de la carrera.

Vuelta tras vuelta fui haciéndome al circuito y comenzar a disfrutarlo, hasta que llegó la 6ª vuelta. Un intermitente dolor abdominal después del almuerzo, me fue castigando durante largo rato y en sucesivas vueltas. Con mucho esfuerzo y con la ayuda de Jose que me fue acompañando e incluso le pedí que me hiciera el pino en mitad de la rambla (esta fue la única nota cómica, teníais que haber visto la cara de los corredores que pasaban y miraban preguntándose ¿qué hacen estos chalaos?) logré llegar a meta y pasarle el relevo a Ana. Seguíamos a empate con Bicicletas Gonzalo pero ahora ellas nos sacaban 32 segundos. Tras dos vueltas de Ana conseguí encontrarme algo mejor. En la última de las dos siguientes vueltas se me atragantó la cuesta fatídica del kilómetro 5,50. El dolor no se había ido por completo, me notaba cansada y las pulsaciones comenzaron a bajar hasta 145, cuando lo normal para mí en una fuerte pendiente es que tenga entre 175-187. A mi izquierda me sorprendió el atardecer y en mi mente solo había dos palabras acompasadas con la respiración: “venga, vamos”. Cuando terminó la cuesta allí estaba Jose esperándome para animarme y continuar el resto del circuito conmigo. Me dejé caer pista abajo aunque con molestias cada vez que había un bache. Jose también tuvo estas sensaciones aunque más leves que las mías.

En la zona de relevos estaba esperándome Ana, ya con las luces preparadas para afrontar las últimas horas de la carrera. Comenzaron a caer cuatro gotas pero no fueron a más y nos permitieron dar las vueltas sin problemas. En la última fue donde más disfruté. Las molestias desaparecieron y el circuito ya me lo conocía lo suficientemente bien como para dosificarme y lanzarme sin miedo en las zonas técnicas. Llegué a meta y nos sobraban 30 minutos… ¡Lástima! De haber contado con 10 minutejos más habríamos dado otra vuelta y hubiéramos quedado primeras. Las clasificaciones quedaban con empate a 13 vueltas y con mejor tiempo para el equipo de Bicicletas Gonzalo superándonos en tan solo 32 segundos. Para la próxima haremos mejor las transiciones. De todas formas tuvimos mucha suerte acabado las vueltas sin incidentes ni averías y sobre todo con muchas ganas de repetir ¡HIP-HIP-HURRAAA por las Granabikes.com!

El que sí apuró hasta el último segundo, literalmente, fue un corredor que terminó la vuelta entrando por el arco de meta a sólo un segundo de las 23h. ¡Qué bárbaro!

A las 24h se hacía entrega de los premios a cada categoría. La ganadora en la modalidad individual fue Noemía Lopes Silva de Monbike Trek 2, con 14 vueltas (¡ella sola, guauuuu!). El ganador de la prueba fue Ignacio Miravalle Romero de Red Ciclista Taymori con 17 vueltas. En la modalidad de 2 féminas sólo estábamos dos equipos. Así que pódium hacíamos seguro. No obstante, fue divertida la sana competencia que tuvimos con el otro equipo, un aliciente más. Sabemos que en Murcia hay nivel en ciclismo femenino, Ana dio fe de ello en la carrera de la Al-mudaina que tuvo lugar en Murcia.

De esta competición no sólo quiero destacar el valor de los primeros en llegar, sino también de todos aquellos corredores que hacen equipos de amigos y se apuntan con la solo intención de viajar y pasar un gran día de convivencia y deporte.

Tras los sorteos de regalos y ya con nuestras medallas colgando del cuello nos fuimos hasta una barra que había preparado la organización para brindar por el triunfo con Jose y Fede. GRACIAS habéis demostrado una vez más, cuál es el espíritu Granabike, dándonos apoyo y acompañándonos, las 13 vueltas y los 156 km fueron más fáciles de conseguir gracias a vosotros.

Ana, un placer hacer equipo contigo. En esta carrera has demostrado lo que ya sabía de ti, una gran fuerza, resistencia, pasión por la BTT y lo mejor de todo, es que has disfrutado mucho en cada vuelta, has tenido buenas sensaciones, sólo había que verte la cara cuando entrabas por el arco de meta. Enhorabuena compañera y amiga. Madrid nos espera y nos lo pasaremos como enanas.

Clasificaciones oficiales de la prueba.